Una flor al final del túnel
¿Es que uno puede cambiar de carrera a los cincuentaypocos? Por Dios, eso es para los estudiantes, “cuando eres adolescente y no sabes lo que quieres en la vida…” Pues no sé. Dicen que es de sabios cambiar de opinión. También he escuchado que, a más viejo, uno es más sabio, entonces prefiero quedarme con el segundo axioma que con el de adolescente desubicado que no sabe si lo que quiere es influido por los demás o es una elección personal. ¿De qué va todo este rollo? Cuando me salí de Bimbo, Laura , una alta ejecutiva independiente, muy generosa, que apenas conocía, me regaló un librazo: Working Identity , de Herminia Ibarra. Gracias a ese libro entendí que la carrera sí se puede cambiar a los 20, 30, 40 o 70 (como el Coronel Sanders) sin el menor remordimiento de conciencia. Desde hace tres años he probado independizarme con mi propia empresa de consultoría, Tri...